jueves, 14 de diciembre de 2017

In my life

Soy una rebelde casi  cuarentona y posteo de forma muy esporádica, sin la disciplina de un bloguero real. Antes tenía mucho tiempo para escribir, no tenía tantas obligaciones, la vida era diferente, más fácil en algunos sentidos.
Pero quién carajo dijo que la vida es fácil. De hecho, la vida es difícil, llena de personas y situaciones complejas donde nos cuesta encajar. Nos topamos con la cruda realidad de la dureza de la vida una y mil veces. Uno cae y se levanta, se olvida cómo funciona todo y luego cuando vas cogiendo ritmo todo se viene abajo de nuevo. Esto aplica a todos los ámbitos. Pero aun así, hay que buscarle la gracia al asunto.
Una de las cosas que yo más aprecio y valoro en la vida es la amistad. Quienes realmente me conocen pueden dar fe de ello, tengo amistades viejas que he cultivado a lo largo del tiempo. Mis amigos son la familia que yo he escogido. Por ahí algunos lectores van a decir que saben de algunas amistades que ya no forman parte de mi top list. En mi defensa digo que: algunas veces el destino y las afinidades tienen planes propios y hacen que nos alejemos de algunas personas, conservemos otras y conozcamos a nuevas. Peor aún, hay amistades que de un momento a otro se van de este plano, pero que juro que buscaré en otros planos. Esto es para ti pequeña, que siempre te quejaste que sólo escribía de tu hermano y nunca de ti.
Mis aventuras con amigos son infinitas y disfruto recordar todas, las graciosas, las tristes, las traviesas y  las malosas (tengo especial cariño recordando estas últimas). Sentada en mi escritorio tengo días donde me rio sola, tomo el celular y les escribo: oye te acuerdas de esto y cuándo hicimos aquello. Mi corazón se llena de alegría y de nostalgia.
Ahora de "grande" me he vuelto ridículamente sensible y llorona  en general y más con esta clase de recuerdos. Atrás quedaron los deseos de ser la cabeza femenina de la mafia, calculadora y gansteril. La cara de pesada es lo único que he conservado.
Este post es un desorden de sentimientos y es que así me tiene esta época de fin de año. Vuelvo a mi clásico sentimiento escolar, tengo una semana para resolverlo todo y cerrar el año tranquila.
Entre tanto que hacer, el sábado celebro Navidad con los demás miembros de la Cosa Nostra, es decir las del colegio y nuestras respectivas familias. Hoy por hoy, todas somos una gran familia y nos amamos. A veces estamos muy lejos pero cuando nos vemos, estamos nuevamente en 1ero de secundaria jurando que seríamos amigas para siempre y así lo hicimos.
"La amistad es tan misteriosa e intensa como el amor", lo tomé de un artículo que hace poco escribió Vargas Llosa. Esa frase no puede resumir de forma más perfecta lo que para mí es la amistad. Viejos amigos que guardo en mi corazón y memoria, nuevos amigos que conozco y cultivo con ilusión y respeto.
Hoy parte una amiga y en una semana otros amigos. Todos tan queridos y especiales para mí. Dejan este país en busca de mejores horizontes.
Lo que menos tolero es que ahora lo tolero. Tolero vivir con la ausencia física temporal de quienes tanto quiero. Supongo que algo de madurez hay en mí que me hace saber que mis amigos deben volar porque su felicidad está en otro lugar. Y sé que así será.
Odio las despedidas tanto como las sorpresas, ambas me acorralan en una situación muy vulnerable. Pese a la distancia, "la amistad trasciende el tiempo y el espacio" esa frase si es mía, creo, siempre la digo.
Me calmo, ahora para mi suerte, hay tecnología, aquella que me ayuda a diario a tener contacto con amigas que hace mucho no están aquí. Las cuatro brujas del día a día que andan desperdigadas por el mundo, amistades bonitas.
Mi corazón es grande, sólo metafóricamente, lo certificó el cardiólogo en Agosto de este año, y guardo en él un lugar profundo para todos mis amigos. Les regalo mi lealtad, mi tiempo,  mis bromas y por su puesto mi cariño.
Los dejo, he escrito este post en mi celular, cortesía de una actualización de mi PC. Hay sol hoy, mucho camino por recorrer aún. Con amigos que son mi familia, con mi familia que son mis amigos. Te regalo esta https://youtu.be/-eCh3y5VROM (sube el volumen)

11 comentarios:

  1. Así pasen los años, tu esencia nunca cambió...siempre serás «La Rochi» que todos queremos.Crítica juiciosa, duray sobre todo única.

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  3. Que lindo lo que escribes, pienso igual, la familia uno la va haciendo con las personas que quieres, eso de la sangre pof!
    Me encanta esa canción
    RG

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  4. Rochiii!! reconozco que se me aguaron los ojos un poco!!!! te quiero mucho... y las brujas desperdigadas por el mundo!!

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  5. Rochii!!! tengo que reconocer que se me aguaron un poco los ojos.
    Te quiero mucho a ti... y a las otras brujas desperdigadas por el mundo!

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  6. ¡Hola!Me llamo Kevin y soy alumno de Sandra Bustamante. Que letras tan lindas, han tocado en mi ondo presente. Un saludo y escriba más por favor!!

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    1. Apreciado Kevin, es una alegría para mi saber que leerme te hizo sentir bien. Es mi objetivo, trasladar mi cariño a las personas. Mucha suerte!

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